Principios Activos
HIDROLATO DE LAVANDA: Es la estrella de los hidrolatos y probablemente el más utilizado por sus múltiples virtudes terapéuticas. Aplicado sobre la piel, el hidrolato de lavanda es un excelente regenerador de la epidermis. Suaviza y refresca la piel después de una larga exposición al sol. La lavanda calma igualmente las irritaciones, quemaduras y picaduras de insectos.
JENGIBRE: uno de los principales beneficios que ilumina la piel. Es un potente antiojeras y además disminuye las imperfecciones.
TÉ VERDE: Es un ingrediente casi obligado en los tratamientos antiedad y en los productos de protección solar, asà como los post-solares. Se trata de una planta muy rica en antioxidantes de tipo polifenol.
CAMOMILA: La camomila tiene propiedades descongestivas y suavizantes gracias a su contenido en aceites esenciales y flavonoides. Cuida la piel sin alterar el manto hidrolipÃdico ni el pH de la piel, estabilizándola. Incluso si ya existe un problema de rojeces o picor, la camomila calma la piel y reduce su sensibilidad.